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Una sesión de bici estática de lo más dinámica

Por un escritor de hombre misterioso

¿No tienes un rodillo inteligente ni usas plataforma de ciclismo virtual? Prueba esta sesión de 30 minutos de cambios de ritmo y no la echarás de menos
El fin de las vacaciones y la vuelta a la rutina laboral puede suponer un brusco descenso de la actividad física a la que teníamos acostumbrado a nuestro organismo en la época estival. De pronto, con horarios y desplazamientos diarios, cuesta encontrar hueco para hacer unos largos en la piscina, salir a rodar con la bicicleta o descubrir un sendero a través de una buena caminata. Con el calendario en la mano, iremos colocando alguna sesión de gimnasio o running para compensar el sedentarismo, pero habrá días en que el reloj no dé para más. En esos casos, si conservas la vieja bicicleta estática, tienes una buena opción doméstica para realizar un entrenamiento rápido y eficaz de mantenimiento. Lejos de los modernos rodillos inteligentes que trazan la ruta y son capaces de simular memorables ascensiones, quienes no hayáis llegado a ese punto y conservéis las estáticas de toda la vida, podéis caer en el error (y en ocasiones sopor) de poneros a pedalear sin más mientras escucháis vuestro pódcast favorito. Probad mejor una rutina de cambios de ritmo. El programa de radio lo podéis dejar, en eso no me meto, pero a las piernas llevarlas por el canal que os proponemos: - Comienza con un calentamiento de 5 minutos a baja resistencia y ritmo alegre. - Sigue con otros 5 minutos de resistencia media poniéndote de pie sobre los pedales cada 30 segundos por lapsos de 10 segundos. - Baja totalmente la resistencia y pedalea todo lo rápido que puedas durante 1 minuto. - Vuelve a una resistencia media/alta y dale duro otros 5 minutos - Pasa a resistencia alta y ponte de pie 2 minutos. - Vuelve a quitar la resistencia y márcate un sprint de 1 minuto. - Recupera 1 minuto. - Ahora llega tu pequeño puerto del día. Sube la resistencia y pedalea 5 minutos, el último de ellos de pie al máximo esfuerzo. - Tu último sprint de 1 minuto sin carga. - Recupera bajando la intensidad durante 4 minutos. Ya lo tienes. Han sido 30 minutos. Entrenamiento y pódcast completado. ¡Vamos a por el invierno!